martes, 21 de mayo de 2013

Lanata desbarranca

El nuevo fenómeno del espectáculo, Jorge Lanata, es un especialista en montar shows con fuegos de artificio. Pero el problema radica cuando algunos confunden el entretenimiento con el periodismo.

El show de la denuncia antiK que realiza el hombre del Maipo todos los domingos (en guerra ahora con el fútbol) se cae a pedazos cuando se lo intenta relacionar con la realidad.

La campaña para destruir la figura de Boudou (un traidor a la causa neoliberal) a través del tema Ciccone se cayó cuando finalmente apareció el dueño del chancho, o sea Raúl Moneta. Como afirmara el periodista Luis Bruschtein "Vanderbroele trabajaba para Moneta y no para Boudou. Los agujeros que tenía la investigación periodística eran evidentes desde antes, pero el caudal de notas y el ametrallamiento permanente por parte de los grandes medios los tapaba".

Luego vino el show de la ex asistente de Néstor, Miriam Quiroga, que entre otras cosas le mostró a Lanata  cuadernos de Néstor que no eran cuadernos de Néstor y habló de bolsas de dinero que nunca vio. Luego ante la justicia, al igual que la ex de Vanderbroele no pudo sostener nada de lo que dijo. Y ante la falta de pruebas firmes (y no puros dichos)  la causa se muestra como un mamarracho, igual que el caso anterior pero muy distinto de la atascada denuncia del lavador de dinero de Clarín Arbizu.

Así las cosas, lo de Quiroga le dio a Lanata para armar el show de la "bóveda" , donde el arquitecto entrevistado nunca la mencionó como tal aún frente al propio Lanata que hacía oidos sordos a su propio entrevistado ya que le frustraba el notición.

Y ahora vuelve con Boudou, casualmente cuando la diputada Diana Conti lo mencionó como posible presidenciable para la continuidad del proyecto. Así vienen los viajes a Uruguay, tan afectos a los crispados por el dólar.

Pero este caricaturesco personaje, ídolo de la clase media reaccionaria, diciendo que "recontracheckea todo" le pifió en el dato y en definitiva en los hechos.

Lanata aseguró que Boudou viajó a Carmelo con dos bolsos el pasado viernes, sin pasar por migraciones, justo cuando el vicepresidente estaba recibiendo a Lula en Buenos Aires. Mire usted.

Entendemos que se cumple acá la máxima que dice "el ladrón cree que todos son de su condición". La obsesión de Lanata por ensuciar con falsos hechos de corrupción a funcionarios del gobierno tendrá que ver con lavar su enredada vida que de Página 12 lo llevó a hacer negocios con el empresario español procesado por fraude y vaciamiento de Aerolíneas Argentinas, Antonio Mata. Y de denunciar a Clarín hasta el año pasado hoy lo encuentra siendo el bufón preferido de Magneto.

Al hombre del Maipo se le van cayendo las plumas.

1 comentario:

  1. Yo veo un problema grave con este asunto de haber bajado las figuras de calumnias e injurias. Sería mas que conveniente una demanda bien hecha a toda esta gente la cual se diera a publicación pública. Así no tienen límite para tirar cualquier pescado y que te lo enrostren todo el dia.

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