jueves, 10 de noviembre de 2011

D'Elía y el lugar de la violencia

“¿Cuánto te paga el Gobierno?”. “¡Ustedes vinieron acá, mercenarios!”. Estas entre otras delicias le iba gritando el piquetero ruralista Alejandro Gahan a Luis D’Elía mientras lo perseguía de camino a Plaza de Mayo en los comienzos de la opereta destituyente del 2008.

Se comió una piña, tal como se la hubiera comido cualquier gil que a usted o a mi nos persiguiera varios metros basureándonos. Luis no desempeñaba ningún cargo público que le hubiera moralmente impedido reacción alguna. Tampoco es boxeador que tenga la piña prohibida.

Un tarado consiguió algo de lo que fue a buscar esa noche. En realidad no sólo consiguió eso, sino también los 15 segundos de fama en la cadena nacional de medios privados.

Desde La Bengala… queremos manifestar nuestra solidaridad con Luis ante un juicio absurdo. Pero nuestro apoyo no sólo se sostiene en lo absurdo del proceso, sino fundamentalmente en debatir de dónde se disparó la violencia en aquellas jornadas del 2008.

- Recordemos que durante la sublevación de las patronales agropecuarias todo aquel que se movilizara a favor del Gobierno fue sindicado, con la generosa ayuda de las grandes (y también pequeñas) cadenas de medios privados, como un subhumano traccionado a choripanes. La “gente”, los “autoconvocados”, contra los militantes comprados y el pobrerío arrastrado a los colectivos.

- Publicaba Perfil el 24 de marzo de 2008: “El camionero Carlos Eduardo Buquet, de 34 años, fue apuñalado este sábado por oponerse al paro agrario. La pelea comenzó cuando Buquet estaba repartiendo carne y en esa circunstancia fue increpado por un hombre, que vio que el camionero realizaba su trabajo ajeno a la protesta del campo. Luego de discusiones y forcejeos, según el denunciante, el agresor, identificado como Pablo Guillermo Bogliolo, extrajo un cuchillo, lo apuñaló y luego escapó”.

- El 26 de mayo de 2008, Minutouno.com publicaba: “Un hombre de 64 años falleció hoy por problemas cardíacos en un sanatorio de la ciudad cordobesa de Villa María, donde llegó tras estar demorado en un corte de ruta que realizan los productores agropecuarios en Laboulaye. El comisario mayor Jorge Jus explicó que la ambulancia que trasladaba a Natalio Porta fue interceptada en corte de ruta realizado en Laboulaye, donde los productores no le habrían permitido el paso”.

- En marzo del 2009, el ruralista Alfredo De Angeli amenazó al por entonces titular de la Comisión de Agricultura de Diputados, Alberto Cantero, “por el bien de sus hijos y nietos”. Durante el 2008 la casa de Cantero había sido atacada por manifestantes antigubernamentales.

- “Si pasás, te mato, escuchó en voz baja Roberto Castaño, al tiempo que sintió cómo el caño de un arma de fuego se posaba sobre la panza. La amenaza surgió de un hombre que participaba, junto a un centenar de productores, de un corte en la intersección de las rutas 72 y 3, en la localidad bonaerense de Coronel Dorrego, el viernes por la tarde. La intimidación se produjo cuando Castaño y su mujer intentaron burlar la protesta al querer pasar por la banquina a bordo de una moto. Se espera que el atacante –identificado por la policía– sea procesado por la UFI Nº 9 de Bahía Blanca, bajo el delito de amenazas calificadas. (Página 12, 24 de marzo de 2009).

Los niveles de violencia ejercida por los piqueteros rurales en las rutas y en los pueblos fueron de tal nivel que llevaron a recordar a los “comandos civiles” antiperonistas. En su tiempo discutimos con Mario Wainfeld que aquel parangón no había sido una exageración destemplada.

Hoy parece increíble que todo aquello hubiera tenido lugar. Por ello, también nos resulta increíble pensar que la justicia pueda condenar a Luis D’Elía por una piña a un provocador involucrado en un conflicto con consecuencias mucho más desmesuradas que un cross de justicia social.

1 comentario:

  1. Que se metan con el profe es una cagada, coincido plenamente si un gil viene de agite y lo más seguro es que se lleve un bife con papas.
    Todavia recuerdo la imagen del rio de leche vertida en los campos, que HIJOS DE PUTA.

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