¿Y para qué vivir, si ya no tienes fe en tu hermano, al que no amas ya? ¡Ya no me digas que se siente! Si no se cambia hoy, no se cambia más... Y tus hijos sabrán, que vendiste tu amor... L. A. Spinetta
miércoles, 17 de febrero de 2010
De momento, desconectados
Telefónica nos ha dejado (des)colgados. Romperemos para poner a prueba (y van...) la eficiencia privada. Aunque lo más probable es que estemos privados de eficiencia. Ya estamos como el inefable rabino Bergman...
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