Salvavidas de plomo

En el intento por darle una manito a Mauricio, las grandes empresas de comunicación no dudan en desplegar todo tipo de argumentos. Hoy leemos en La Nación (cuyo director fue víctima de los espías) que "cuando buscaba un jefe policial, Macri -según altas fuentes porteñas- preguntó en la embajada de Estados Unidos, el FBI y la DEA quién era el mejor policía disponible, y todos le sugirieron a Palacios... Macri compró a Palacios y compró esos problemas. Ahora empieza a reconocer el error, dicen sus allegados".

Veamos. Según este nuevo argumento a Palacios se lo plantó, no ya el Gobierno nacional, sino los EEUU. Una maravilla. Pero aquí vemos dos problemas. Por un lado, que desde que se desató el escándalo fue el propio Macri quien se encargó de explicitar su histórica relación con Palacios. Por el otro, aún suponiendo que esto fuera verdad, creemos que sería muy lamentable volver a los tiempos en los cuales el "gran país del norte" designaba funcionarios en lo que fuera su "patio trasero".

Recuperar una importante cuota de soberanía nacional fue uno de los grandes logros de este Gobierno. Recordemos que en la Argentina neoliberal los planes económicos venían redactados en inglés y a nadie se le ocurría traducirlos, ni idiomática ni políticamente. En cambio este Gobierno tuvo las suficientes pelotas para decirle en la cara a Bush que no se sometería a los condicionamientos del proyecto ALCA. Y mal no nos fue. La economía creció como nunca. Y, paradojas de la Argentina llorona, quienes más se quejaron fueron los más favorecidos por este proceso de acumulación.

Por ello, y por las demás conquistas alcanzadas en todos estos últimos años, estamos convencidos que volver atrás sería condenarnos a la miseria política, económica y social. Sería bueno recordar esto cuando nos quejamos por ciertas actitudes brasileñas.

Nuestro proyecto no es el de arrastrarnos ante los poderosos y a la vez mostrarnos poderosos ante los argentinos de a pie. Nuestro proyecto es construir una patria justa, libre y soberana. Una patria para todos y no sólo para Tinelli, Susana & Cía.